Hoy en día vivimos conectados prácticamente 24 horas a las redes sociales, y con una masificación de información importante, estamos permanentemente conectados porque lo usamos para estudiar, para trabajar pero también para momentos de ocio, y para relacionarnos con amigos y familiares.
Las redes sociales, a veces nos muestran la vida perfecta de nuestros amigos y hay gente que se siente frustrada viendo esa "perfecta" vida que tienen otras personas o que nos hacen creer que tienen, ya que muestran una vida más positiva de lo que en realidad es.
Por otra parte, las redes sociales nos bombardean con una perfección que no existe, lo que supone una presión social, lo que hace que muchas personas aparenten que todo va bien.
Se ha visto que es importante desconectarse de las redes para estar feliz y más tranquilo, sobretodo en estos momentos en que recibimos información sobre el covid-19, sobre la invasión de Ucrania cosas que generan un cierto malestar.
De vez en cuando hay que tomarse un descanso de las redes sociales ya que mejora nuestro bienestar, y nuestra ansiedad, y en muchos casos dejamos de comparar nuestra vida con la vida de nuestros amigos virtuales.
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